Obedecer a Dios siempre es lo correcto, pero no siempre es lo más fácil. Necesitamos valentía, una cualidad especial de la mente y el espíritu que nos permite enfrentar el peligro, la oposición y los desafíos con firmeza y gallardía. Usando el ejemplo de la vida de Josué, el Dr. Stanley explica que obedecer los principios de la Palabra de Dios siempre nos es de bendición.
Bosquejo del Sermón
Ya que la obediencia no es instintiva, debemos entrenarnos a nosotros mismos a depender del Señor. Esta es la clave para el éxito y las bendiciones. Esta semana, el Dr. Stanley enseña cómo Dios ayudó a Josué a crecer en confianza y obediencia.
Pasaje clave: Josué 1.1-9
Lecturas de apoyo: Deuteronomio 34.7, 10-12; Josué 1.10, 11; 23.1-3, 6-8; 24.29-31; Jueces 21.25; Proverbios 3.5, 6; Romanos 8.28; Salmo 32.8; Salmo 119.105; 1 Juan 5.14
Obedecer a Dios siempre es lo correcto y lo más sabio por hacer; pero eso no significa que sea la opción más fácil.
► “Ser obedientes a los principios de la Palabra de Dios es lo más importante que podemos hacer”.
Dios desea bendecir y guiar a sus hijos. También está dispuesto a exhortarnos para que seamos obedientes a Él…
Pues sabe que esto es lo mejor para nuestra vida y que requiere que seamos valientes.
La valentía es la calidad mental y espiritual que nos faculta para enfrentar el peligro, la oposición o los desafíos de la vida con valor, calma y firmeza.
La valentía no significa que nunca tendremos temor, sino que aprendemos a enfrentar los momentos difíciles con la ayuda del Señor.
► “Dios le dijo a Josué en tres ocasiones: ‘Esfuérzate y se valiente’. Sabía lo que Josué tendría que enfrentar. Cuando el Señor nos dice algo en repetidas ocasiones, es para nuestra protección y dirección”.
¿Por qué Josué necesitaba ser valiente?
Porque había sido llamado a continuar con el liderazgo de Moisés, quien fue un gran hombre de Dios.
Porque su misión, guiar al pueblo en la conquista de la Tierra Prometida, era abrumadora.
Las promesas que Dios dio a Josué están escritas en Josué 1.3-7. Le dijo a su siervo que…
La tierra ya le había sido dada a él.
Nadie podría hacerle frente y vencerlo.
Él estaría a su lado, así como había estado con Moisés.
Israel tomaría posesión de la tierra que se les había prometido.
La obediencia era la clave del éxito.
► “Dios desea que seamos la mejor persona que podamos llegar a ser”.
El Señor dirigió a Josué a meditar en su Palabra, para que así pudiera tener éxito (Jos 1.8). ¿De qué manera podemos aplicar esto a nuestra vida? Tenemos que…
Leer la Biblia a diario.
Mantener una conversación constante con Dios, en relación a lo que hemos leído.
Leer las Sagradas Escrituras como si el Señor nos estuviera diciendo lo que debemos hacer, pues eso es lo que sucede.
Comprender que Dios desea que tengamos éxito, un carácter recto, y que seamos lo mejor que podemos ser. Él sabe lo que necesitamos.
► “Si clamamos por su dirección, nos sorprenderemos al ver cuán específica es la Palabra de Dios en relación a ciertas áreas de nuestra vida”.
Meditar en la Palabra de Dios…
Calma nuestro espíritu.
Purifica nuestro corazón.
Agudiza nuestra percepción.
Clarifica nuestra dirección.
Nos ayuda a discernir los consejos que recibimos.
Aumenta nuestra fe.
Nos guía al éxito.
Trae como resultado que encontremos y cumplamos el llamado de Dios para nuestra vida.
Después de ver el sermón
¿Cuál es el desafío más abrumador que hoy enfrenta? Pídale a Dios que le ayude a lidiar con esto de tal forma que pueda salir victorioso.
¿Cuáles son los pasajes de la Biblia que le ayudan durante tiempos de prueba, una vez que ha meditado en ellos?
