Desde el momento en que usted le entrega su vida Cristo, Dios lo inscribe en su aula de la escuela de la fe porque desea desarrollar su relación con Él y mostrarle lo mejor de la vida. En este mensaje, el Dr. Stanley le enseña los cinco requisitos indispensables para vivir en plena dependencia y sumisión al Padre.
Bosquejo del Sermón
Abraham estaba dispuesto a obedecer a Dios, pero no fue siempre así. En el sermón de esta semana, el Dr. Stanley explica cómo el patriarca de Israel fue creciendo en la fe, tal como nosotros lo hacemos.
Pasaje clave: Génesis 12.1-7
Desde el momento en que entregamos nuestra vida a Cristo, entramos en la escuela de la fe.
► “El desarrollo de la fe no es una línea recta ascendente. En ocasiones tropezamos y titubeamos. Lo cual está bien, siempre y cuando progresemos”.
La fe es la convicción plena de que Dios hará lo que ha prometido. Por tanto, siempre debemos recordar que…
Dios desea hablar con cada uno de sus hijos en dondequiera que estén. Esa es la razón por la que Cristo dio a sus discípulos la Gran Comisión (Mt 28.18, 19).
Al depositar nuestra confianza en Cristo, dimos el primer paso hacia una vida de fe.
El Señor desea guiarnos y obrar por medio de nuestra vida, pero debemos seguirlo y confiar en Él.
¿Qué podemos hacer para caminar por fe? Debemos aprender a…
1. Escuchar a Dios.
Así podemos saber adónde debemos ir, y qué tenemos que hacer.
Es la manera en la que podemos reconocer cuando Dios nos habla.
Escuchar la voz del Señor es una habilidad que debemos desarrollar.
Escuchar la voz de Dios y obedecerlo van de la mano.
2. Obedecer a Dios.
La obediencia se alcanza después de un proceso de ensayo y error.
Cuando sufrimos las consecuencias de la desobediencia, aprendemos la importancia de someternos a Dios.
Nuestro camino no siempre es fácil ni directo, pero Dios nos muestra su voluntad de una manera clara, y al seguirla seremos bendecidos.
3. Depender de Dios.
Recuerde que, en muchas ocasiones, Jesucristo les dijo a sus discípulos que debían confiar en Él. La obediencia es el resultado natural de confiar en Dios.
Cada vez que sienta que no necesita depender del Señor, se está dirigiendo en la dirección equivocada. En Él encontramos seguridad.
► “Solo por la gracia de Dios podemos seguir respirando. No hay nada que podamos hacer separados de Él”.
4. Esperar en Dios.
Esto es un acto de adoración. Al esperar en Él, lo reconocemos como nuestro Señor.
Siempre debemos recordar que el Señor obra en favor de aquellos que esperan en Él (Is 64.4).
Abraham hizo mal al no esperar en Dios, y como consecuencia nació Ismael; lo cual fue un error que trajo graves consecuencias.
5. Reconocer, arrepentirse y beneficiarse de los fracasos en la fe.
Esto requiere que tengamos el deseo de crecer.
La fe de Abraham llegó a su punto más crítico cuando recibió el mandato de sacrificar a Isaac. Estuvo dispuesto a obedecer a Dios, aunque esto implicara perder a la persona que más amaba.
Su confianza en Dios fue probada cuando Abraham les dijo a sus siervos que tanto él como su hijo regresarían después de haber adorado en la montaña.
Así como sucedió con Abraham, Dios prueba cuán obedientes somos en realidad.
Después de ver el sermón
Considere los siguientes pensamientos y preguntas:
¿Qué es lo que más le inspira de la fe de Abraham? ¿Sus éxitos que nos muestran lo que es posible alcanzar? ¿O sus fracasos, los cuales nos animan a continuar adelante? ¿O quizás algo más?
¿Cuándo fue la última vez que se dio cuenta que Dios le hablaba? ¿Qué sucedió?
