Es fácil vivir en paz con la gente que nos quiere y está de acuerdo con nosotros, pero ¿qué pasa con los que se nos oponen a cada paso? En este mensaje, el Dr. Stanley nos dice que hay esperanza para que los creyentes vivamos en paz, incluso con quienes nos han ofendido. Dios no solo nos llama a buscar la paz y a perseguirla (véase Salmo 34.14), sino que también Él nos capacita por medio del poder del Espíritu Santo.
Bosquejo del Sermón
Amar a otros es tanto un privilegio como una responsabilidad, pero eso no significa que no traiga sus desafíos. En el sermón de hoy, el Dr. Stanley provee consejos específicos y prácticos acerca de cómo lidiar con relaciones problemáticas.
Pasaje clave: Romanos 12.17-21
Lecturas de apoyo: Marcos 9.50; Juan 13.34, 35; Efesios 4.32; Colosenses 3.12, 13
La Biblia nos declara que, siempre que podamos, debemos vivir en paz con las demás personas. Sin embargo, esto es casi siempre más fácil decirlo que hacerlo.
► “Vivimos en un mundo en el que todos tenemos una naturaleza corrompida y pecaminosa. Estamos en conflicto con Dios, con nosotros mismos y con las demás personas”.
El conflicto con otros…
Hace que el entorno se vuelva difícil y estresante.
Viene como resultado de permitir que los hábitos humanos nos controlen.
Puede suceder en cualquier momento, aun a los creyentes.
Está ligado a una raíz que debe ser descubierta.
Cuando el conflicto llega, somos responsables de hacer nuestra parte para resolverlo. Tenemos que…
1. Evaluar cuánto valoramos la relación.
Decidamos si debemos o no mantener una relación personal con la otra persona.
Si la respuesta es “sí”, debemos hacer lo que esté a nuestro alcance para mantenerla.
2. Comenzar a hablar y aprender a escuchar.
Debemos estar dispuestos a mantener la conversación y a escuchar con atención.
3. Ser sincero y transparente.
Es importante que en todo momento estemos dispuestos a admitir cuando nos hayamos equivocado.
4. Trabajar para encontrar la causa básica.
Debemos ir más allá de los conflictos superficiales para encontrar la raíz del problema, la cual puede estar en la niñez. Puede que esto requiera de la ayuda de un consejero cristiano.
5. Estar dispuesto a trabajar para superar los problemas.
No debemos esperar que la solución venga de manera inmediata. Evaluar estos aspectos puede llegar a tomar cierto tiempo.
Es esencial que aprendamos a dar amor y también a recibirlo.
► “El Espíritu Santo nos permite ver más allá de las acciones de la persona, para verla simplemente cómo es en realidad”.
¿Hasta dónde debemos llegar con tal de resolver un conflicto?
Si depende de nosotros, debemos hacer todo lo que sea posible (Romanos 12.18). Sin embargo, esto nunca nos exigirá que violemos un principio bíblico.
Aun después de hacer todo lo que esté a nuestro alcance, debemos aceptar que quizás la otra persona decida alejarse de nosotros.
Cuando la paz parece imposible…
Pídale a Dios que le guíe.
Busque la ayuda de consejeros piadosos.
Evalúe los consejos que estén de acuerdo a la Palabra de Dios.
Cultive la actitud correcta al aprender a demostrar...
Un corazón puro (Mr 9.50).
Amor (Jn 13.34, 35).
Paciencia (Col 3.12, 13).
Perdón (Ef 4.32).
Después de ver el sermón
Piense en una relación que le gustaría mejorar. Autoevalúese con sinceridad, para determinar si debe cambiar algo en su vida con tal de conseguirlo.
El Espíritu Santo siempre le ayudará a resolver los conflictos con gracia y buena voluntad. Ore y pídale ser lleno con su presencia, sobre todo durante tiempos de conflictos.
