¿Cree usted que Dios tiene el control total de todo, incluso de las situaciones que enfrenta hoy? En la primera parte de esta serie de cuatro mensajes, el Dr. Charles Stanley nos recuerda que comprender la soberanía de Dios —y actuar según su verdad— fortalece nuestra fe y calma nuestros temores. Acepte el amor de Dios por nosotros.
Bosquejo del Sermón
En algún momento, sin importar la etapa de la vida en la que estemos, llegaremos a sentirnos sin fuerzas y sin opciones; sobre todo, en tiempos de adversidades. Es en esos instantes que aprendemos a confiar en Aquel que es mayor que nosotros. En este sermón, el Dr. Stanley nos exhorta a confiar en el amor de nuestro Dios fiel.
Pasaje clave: Salmo 103.19-22
Lecturas de apoyo: Génesis 1.1; Juan 6.37; 14.6; Romanos 8.28; Colosenses 1.17
La adversidad puede hacernos sentir desanimados, temerosos y solos. Sin embargo, si recordamos que Dios tiene control de todo lo que sucede, podremos enfrentar cualquier cosa.
► “‘Recordemos que Dios tiene el control. Esa realidad vendrá a ser un ancla en nuestra vida”.
En el Salmo 103.19, David menciona…
El trono de Dios. El lugar desde donde reina sobre todo el universo.
La soberanía de Dios. Su absoluto dominio e ilimitada autoridad.
La Biblia, desde Génesis hasta Apocalipsis, contiene muchos ejemplos de la soberanía de Dios. Por ejemplo, Él…
Creó el universo (Gn 1.1).
Sostiene su creación y todo lo que está en ella (Col 1.17).
Destruyó al mundo con un diluvio (Gn 6.17).
Confundió el idioma humano en la torre de Babel (Gn 11.9).
Hizo un pacto con Abraham, el cual cumplió a cabalidad (Gn 12.1-3).
Redimió a la humanidad de la esclavitud del pecado, por medio de Jesucristo, quien vino de la descendencia de Judá (lea 1 P 3.18).
Usa todo para nuestro bien, aun cuando la maldad nos acosa (lea Ro 8.28).
► “Sin importar lo que enfrentamos, Dios puede usar la situación para nuestro bien”.
Como creyentes en Cristo, podemos vivir confiados de que…
1. Dios está involucrado en nuestro diario vivir.
Él ha prometido proveer para nuestras necesidades, protegernos y guiarnos.
2. Dios dispone cada circunstancia para nuestro bien.
Como hijos suyos, los cristianos somos cuidados por el Padre celestial, quien posee un ilimitado poder y nos ama sin condiciones.
3. Nada puede tocarnos sin la voluntad permisiva de Dios.
Dios es nuestro protector.
Si escoge que algo doloroso llegue a nuestra vida, es porque tiene una razón específica para hacerlo, aunque quizás en ese momento no podamos comprenderla.
► “Podemos mirar al futuro con plena confianza. Si el Señor ha dicho que hará algo, con seguridad lo cumplirá”.
4. Como Dios es soberano, podemos confiar en el futuro.
El Señor ha preparado bendiciones para nuestra vida que nunca imaginamos recibir.
Nuestros planes nunca serán mejores que el plan que nuestro Dios omnisciente ha trazado.
Confiar en el amor del Dios soberano nos libera de preocupaciones.
No hay nada imposible para el Señor. Pongamos todo en sus manos y descansemos en su soberanía.
Después de ver el sermón
¿Acaso hay algunas áreas en su vida que trata de mantener bajo su control? Ore, y pídale al Señor que le ayude a ponerlas bajo su perfecto y amoroso cuidado.
Si le cuesta trabajo confiar en la soberanía de Dios, hable con otros creyentes en Cristo al respecto. Pídales que le cuenten cómo el Señor ha obrado en sus vidas para liberarlos. Esta es una manera en la que podemos hacer realidad este pasaje que dice: “…animaos…y edificaos unos a otros…” (1 Ts 5.11).
