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Sermón de TV

Cómo mantenerse joven y útil toda la vida

El Dr. Stanley comparte varios principios en cuanto a cómo vivir una vida productiva.

24 de septiembre de 2022

El Dr. Stanley dice: “Se es joven y útil a cualquier edad”. Este es un principio que le ha guiado durante décadas de servicio productivo. También comparte otros principios clave para tener una vida marcada por la vitalidad y la productividad. Independientemente de nuestra edad, nunca es demasiado tarde para empezar a confiar en Dios.

Bosquejo del Sermón

CÓMO MANTENERSE JOVEN Y ÚTIL TODA LA VIDA
PASAJE CLAVE:
Salmo 92.12-15
LECTURAS DE APOYO:
Deuteronomio 6.5 | Salmo 37.1, 7, 8 | 1 Pedro 5.7
INTRODUCCIÓN

Envejecer es inevitable, pero esa no es razón para dejar de ser fructíferos y útiles.

El secreto para tener una vida productiva no radica en una píldora, en una bebida, o en una rutina de ejercicios, sino en obedecer al Señor. Ninguno de nosotros conoce el tiempo que viviremos, pero siempre y cuando tengamos aliento, debemos desear ser útiles y fructíferos para Dios. Es Él quien determina el tiempo que viviremos; sin embargo, tenemos la responsabilidad de guardar los mandamientos de Dios para vivir más productivamente.
DESARROLLO DEL SERMÓN

En el Salmo 92.12-15, el Señor nos dice cómo podemos ser fructíferos en cualquier etapa de la vida.

  • “El justo florecerá como la palmera” (v. 12). Este pasaje solo se aplica para los cristianos. Florecer significa dar fruto en abundancia. La palmera que aquí se menciona no solo producía fruto, sino además sus hojas eran usa- das para los techos y las vallas de esa época.
  • “Crecerá como cedro en el Líbano” (v. 12). Estos árbo- les podían llegar a crecer hasta treinta y seis metros, y sus ramas se extendían a su alrededor. Por eso se les veía como símbolo de fortaleza.
  • “Plantados en la casa de Jehová, en los atrios de nuestro Dios florecerán” (v. 13). Aquellos que se man- tienen cerca de Dios recibirán bendiciones espirituales en abundancia.
  • “Aun en la vejez fructificarán; estarán vigorosos y verdes, para anunciar que Jehová mi fortaleza es rec- to, y que en Él no hay injusticia” (v. 14, 15). Los justos, en vez de venir a ser inútiles, continúan dando fruto abundante en la obra del Señor.

La clave para que este pasaje se haga rea- lidad en nuestra vida radica en 10 actitudes esenciales.

Siga aprendiendo. Al dejar de aprender dejamos de crecer en conocimiento, pues nuestro cerebro se envejece. Muchos cambios han ocurrido a lo largo de los años. Mientras la tecnología sigue avanzando, debemos seguir añadiendo habilidades que nuestros padres y abuelos nunca tuvieron que usar. Pero lo más importante debe ser siempre aprender más de la Palabra de Dios y memorizar sus pasajes.

Siga amando. El primer y más importante mandamiento consiste en amar al Señor con todo nuestro corazón, toda nuestra alma y todas nuestras fuerzas (Dt 6.5). También el Señor Jesús nos enseñó y nos dio ejemplos de cómo amarnos los unos a los otros. Al dejar de amar a Dios y a las personas nos llenamos de amargura, resentimiento, hostilidad y odio. Y son esos malos sentimientos los que afectan nuestra salud emocional, mental y espiritual. Dios nos creó para amar, y es de esa manera que podemos mantenernos saludables.
Siga riendo. La risa influye en cada área de nuestro cuerpo, incluyendo nuestro sistema nervioso, al igual que nos libera del descontento y del enojo. De todas las personas del mundo, los cristianos deberíamos ser las más felices, pues contamos con el gozo del Señor y tenemos razones poderosas para estar agradecidos.
Siga dejando. Para mantenernos jóvenes y útiles, debemos aprender a dejar atrás los problemas y dificultades del pasado. No tenemos por qué continuar arrastrándolos. Debemos poner en las manos del Señor todo lo que nos afane, pues sabemos que Él se preocupa por nuestro bienestar (1 P 5.7). Pero si optamos por aferrarnos a las decepciones y desilusiones que hemos sufrido en el pasado, nuestro cuerpo, mente y espíritu se verán afectados de manera negativa. Y si vivimos ansiosos en relación al futuro, también debemos aprender a poner nuestras preocupaciones en las manos de Jesús y a confiar en sus promesas.

Siga anhelando. Mientras más envejecemos, más debemos seguir soñando con nuestro futuro. En vez de poner nuestra mirada en lo que no podemos hacer, debemos concentrarnos en lo que podamos alcanzar por la gracia del Señor. Como hijos de Dios, contamos con el poder del Espíritu Santo que mora en nosotros, para hacer todo lo que nos ha encomendado. Y aunque no sintamos que seamos capaces, no debemos subestimar lo que el Señor puede hacer por medio de nosotros si estamos dispuestos a obedecerlo.
Siga planificando. Sin importar el tiempo que nos quede de vida, debemos seguir haciendo planes para el futuro. Es así que continuamos siendo productivos y fructíferos para el Señor.
Siga haciendo lo que es mejor. Al vivir de esa manera somos animados a continuar adelante.
Siga trabajando. Aunque ya no podamos hacer lo mismo que antes, el hecho de que nos hayamos retirado no significa que debamos dejar de trabajar. Puede que sea tiempo de cambiar de actividad, pero al decirnos a nosotros mismos que no tenemos que trabajar, le enviamos un mensaje a nuestro cuerpo para que deje de funcionar. En la vida cristiana no existe el retiro, pues podemos llevar frutos espirituales e impactar la vida de otras personas hasta el día en que partamos de este mundo.
Siga descansando en el Señor. Debemos vivir cada día dependiendo y confiando en el poder de Dios. Es en Él en quien confiamos para recibir sabiduría, protección y dirección. No debemos sentir temor si descansamos en Cristo. Podemos ir delante de su presencia en oración, y llevar ante Él cada una de nuestras peticiones. Lo cual hacemos, pues estamos convencidos de su fidelidad.
Siga escuchando. Lo más importante que podemos hacer es seguir escuchando la voz de Dios. Aunque es cierto que no podemos oírlo de manera audible, habla a nuestros corazones por medio de su Palabra y de su Espíritu. Al leer la Biblia con una actitud de oración, Él nos guía y nos da sabiduría para comprender el mensaje que desea darnos. Pero si optamos por no escucharlo, no podremos llegar a conocer su voluntad. De manera que, cuando lo escuchamos podemos tomar decisiones sabias, ser guiados a cada paso que demos y ser fortalecidos para resistir la tentación y el pecado.
REFLEXIÓN

  • Revise estas diez actitudes esenciales para mantenerse joven y útil toda la vida. ¿Cuáles de ellas practica? ¿Cuáles debe comenzar a implementar en su diario vivir?
  • Si usted es joven, puede que piense que este mensaje no se aplica a su vida. Sin embargo, ¿cuál cree que sean las ventajas de implementar esas actitudes en su estilo de vida a su corta edad?
  • Si usted ya es anciano, puede cometer el error de creer que es demasiado tarde para ser fructífero y útil. Pero, en lugar de enfocarse en lo que el mundo define como productivo, considere la descripción que Dios da a sus hijos en Salmo 92. ¿Cuál fruto espiritual le gustaría que el Señor produjera en su vida?

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