Saltar al contenido principal
Fotografía por Charles F. Stanley.
Meditación diaria

Vivir por gracia

Como cristianos, sabemos que somos salvos por la gracia de Dios. Pero la gracia no es un regalo de una sola vez.

2 de octubre de 2021

Efesios 2.1-10

Como cristianos, sabemos que somos salvos por la gracia de Dios. Pero la gracia no es un regalo de una sola vez. Después de nuestra salvación, el Señor nos continúa dando esa bendición cada día para que podamos vivir por ella en todos los aspectos de la vida.

El apóstol Pablo escribió en detalle acerca del hecho de que los creyentes somos receptores del favor de Dios, y a menudo comenzaba o terminaba sus cartas con “gracia a vosotros”. Él experimentó el poder de la gracia divina para transformar su vida y fortalecer su servicio (Hch 9.1-20). El apóstol también fue capaz de soportar la adversidad con gozo y  contentamiento porque sabía que la gracia divina era suficiente para su debilidad (1 Co 15.10; 2 Co 12.9). Y el Señor hará lo mismo por nosotros.

Pablo nos insta a perseverar en la gracia de Dios porque es la manera de vivir en plena dependencia de Él (Hch 13.43). Cada vez que el Señor satisface nuestras necesidades, guía nuestros pasos, perdona nuestros pecados o nos consuela y fortalece en nuestras dificultades, nos prodiga el favor divino. Y esto no termina en esta vida. En los siglos eternos por venir, Él nos mostrará “las abundantes riquezas de su gracia en su bondad para con nosotros en Cristo Jesús” (Ef 2.7).

Biblia en un año: Malaquías 1-4

Otros devocionles


Ver todas las meditaciones diarias