La Biblia nos dice que el caminar de Enoc con el Padre era tan cercano que “Dios se lo llevó” (Gn 5.24 NVI). Esto implica que Enoc no murió, sino que fue llevado directamente a la presencia del Señor. A Dios le complace cuando sus hijos buscan seguirlo con esta misma cercanía. Considere los siguientes aspectos:
Reconciliación. Este término significa “Dios moviéndose hacia nosotros”. Podemos tener gozo porque la responsabilidad es toda de Él. Por medio de la cruz de Cristo, Dios ya dio el primer paso en nuestra dirección. Segunda a los Corintios 5.18 dice: “Y todo esto proviene de Dios, quien nos reconcilió consigo mismo por Cristo, y nos dio el ministerio de la reconciliación”.
Confianza en Dios. Debemos tener fe en que Dios provee todo lo que necesitamos para caminar con Él.
Acuerdo. Para apreciar la cercanía que Dios anhela tener con nosotros, debemos estar de acuerdo con lo que la Biblia enseña sobre su Hijo, su Palabra, la Iglesia y el pecado.
Comunión. Así como las relaciones humanas se desmoronan sin una interacción regular, nuestra intimidad con Dios se debilita cuando no pasamos tiempo con Él.
La caminata de fe es un viaje hermoso. Cuando buscamos al Señor por encima de todo, Él dirigirá nuestro camino (Pr 3.5, 6).
BIBLIA EN UN AÑO: ÉXODO 28-30