“En el principio creó Dios...”. Quizás lo haya escuchado muchas veces. En este momento, es posible que piense en el relato de la creación como material para libros infantiles o debates sobre el origen de la Tierra, no como una fuente de ayuda para hacerle frente a la vida. Pero cuando las cargas nos agotan, el primer capítulo de la Biblia nos ayuda a encontrar consuelo y victoria.
Ilustración por Abbey Lossing
CONTEXTO
Es probable que Moisés haya escrito el libro Génesis mientras los israelitas vagaban por el Sinaí.
LEA
REFLEXIONE
¿Qué es “bueno”?
Lo primero que Dios creó en la Tierra fue la luz (Gn 1.3). A lo largo de la Biblia, la luz se convertiría tanto en un símbolo de la presencia de Dios (Is 9.2) como en una descripción de su ser (1 Jn 1.5). Considere algunas de las razones por las cuales la luz fue lo primero. ¿Cómo se aplica esto en su propia vida?
Dios “vio” que la luz que había creado era buena (Gn 1.4). La palabra hebrea tiene connotaciones similares a la palabra en español ver: “observar, prestar atención, percibir, distinguir, discernir”. Reflexione en cuanto a la acción de Dios aquí y explique cómo podría haber incluido todos estos significados. ¿Qué sugiere este versículo sobre la importancia que Dios concede a un examen reflexivo?
Romanos 11.33 (NVI) dice: “¡Qué profundo es el conocimiento, la riqueza y la sabiduría de Dios!”. La palabra hebrea para “bueno” en Génesis 1.4 se deriva de ṭôḇ, que significa “agradable”. Busque todos los lugares donde aparece esta palabra en Génesis 1. Reflexione sobre el papel de la sabiduría de Dios en relación con lo “bueno” aquí.
CONTINUACIÓN DE LA HISTORIA
Después de crear la luz, Dios organizó el mundo y lo llenó de vida abundante.
Los dos primeros días de la creación tuvieron que ver con la luz, el agua y la Tierra. En el tercer día, Dios creó la vida vegetal (Gn 1.11); en el quinto, los habitantes del mar y las aves (Gn 1.20); y en el sexto, toda la vida que habita la Tierra (Gn 1.24). Cada vez, Él reconoció lo bueno. Elija una cosa de estas categorías que pueda ver a su alrededor en este momento, tal vez una brizna de hierba, un rayo de sol, un animal o su propia mano, y examine con detenimiento el objeto que escogió. ¿Qué le parece agradable o “bueno” de él?
¿Qué aprende acerca de los caminos y la manera de Dios a partir del relato de Génesis 1 y de su propia observación de las cosas creadas? Considere el valor de los detalles, al tomar tiempo para reflexionar y apreciar tanto su simplicidad como su complejidad. Encuentre versículos que hablen de lo que haya notado.
Pronto el pecado entró en el mundo (Gn 3), trayendo quebrantamiento y muerte; en Juan 16.33, el Señor Jesús dijo que la vida aquí sería problemática, incluso para los creyentes. Para protegernos del agotamiento mental, Pablo nos anima a pensar en “todo lo verdadero... respetable... justo... puro... amable... digno de admiración... excelente y que... merezca elogio” (Fil 4.8 NVI). ¿Cómo puede lo que ha leído al comienzo de la Biblia ayudarle a seguir esta instrucción?
REFLEXIONE
¿Llegaremos alguna vez a agotar las riquezas de la multiforme creación de Dios?
Los milagros infinitamente complejos de Génesis 1 se describen de manera sencilla: Sea la luz, y fue buena, creando tanto invitación como consuelo. Dios nos invita a deleitarnos en su mundo y nos reconforta con el conocimiento de que las dificultades que nos resultan inmanejables nunca son demasiado grandes para Él.