Cuando estamos en medio de lo que parece una calamidad sin salida, la idea de que algo positivo pueda resultar de nuestro sufrimiento puede parecer imposible. Sin embargo, Dios permite que solo pase lo que contribuirá a sus propósitos y beneficiará en última instancia a sus hijos. Nuestra confianza en Él crece cuando recordamos su fidelidad, tanto en nuestra vida como en las páginas de la Biblia. La historia de Daniel demuestra que Dios puede “hacer mucho más abundantemente de lo que pedimos o entendemos” (Ef 3.20). Sus planes resultaron en bendiciones para el joven exiliado y también tuvieron implicaciones de largo alcance en la historia.
Ilustración por Abbey Lossing
Contexto
En el siglo VI a.C., Nabucodonosor saqueó y demolió el templo de Salomón, destruyó Jerusalén y deportó a Babilonia a todos los ciudadanos judíos, excepto a los más pobres.
Lea
Reflexione
La Biblia dice que, independientemente de nuestra dirección, los creyentes somos ciudadanos del cielo (Fil 3.20).
Daniel y sus amigos eran jóvenes con todas las ventajas, pero la guerra y el exilio cambiaron sus planes (Dn 1.3-6). ¿Alguna vez se ha encontrado usted en un lugar o situación donde no quería estar, donde se sintió atrapado e indefenso?
En Daniel 1.8-13, Daniel se sometió a su situación, pero propuso un compromiso que le permitió a él y a sus amigos honrar al Señor. Y Dios les concedió bendiciones, no solo de vigor físico, capacidad intelectual y comprensión sobrenatural, sino también de favor con su supervisor babilónico y credibilidad ante el rey mismo (Dn 1.15-17, 20).
Lea 1 Pedro 2.11, 12. Mencione las maneras en que nosotros, “extranjeros y residentes temporales” (NTV), podemos “llevar una vida ejemplar entre… vecinos no creyentes”.
Una nación conquistadora cambiaba el nombre a los cautivos, obligándolos a dejar atrás su antigua cultura y asimilarse a la nueva. Daniel y sus amigos tenían nombres hebreos que honraban a Jehová. Pero en Babilonia, les dieron nombres que se referían a deidades locales. Imagínese estar en el lugar de ellos. ¿Cómo afectaría a usted un cambio de nombre forzado?
Continuación del estudio
Después de haber sido despertado por una pesadilla aterradora, Nabucodonosor ordenó a sus consejeros que le dijeran cuál había sido el sueño y su significado. Cuando ninguno pudo, el rey enfurecido ordenó que mataran a los sabios (Dn 2.5, Dn 2.11-13), dejándolos, sin duda, angustiados por la irrazonable sentencia.
Lea Daniel 2.14-30. Enumere los pasos que tomó Daniel para enfrentar la crisis. ¿Cómo podría usted aplicar el enfoque de él en situaciones de tensión propias?
Después de que Dios le dio a Daniel el conocimiento del sueño y su interpretación, ¿cuál fue la reacción del rey (Dn 2.46, 47)? Una vez levantada la sentencia de muerte de los sabios, ¿qué cree que pensaron y dijeron ellos sobre Daniel? ¿Y sobre Dios?
Reflexione
Siglos más tarde, “magos del Oriente” siguieron una estrella hasta Jerusalén para poder adorar al Rey de los judíos (Mt 2.1). El Señor se encargó de que estos funcionarios gentiles supieran que debían buscar al prometido Rey judío.
Daniel se convirtió en el jefe de los magos de su tiempo (Dn 4.9; Dn 5.11), y Dios salvó sus vidas. Eso explica por qué sus profecías habrían circulado en el Oriente. Aunque es probable que nuestra experiencia no incluya detalles sobrenaturales tan dramáticos como los de Daniel, aún así podemos tener credibilidad ante quienes nos rodean.