No podemos caminar con Dios, ni pensar que podemos vivir agradándole si no sabemos cómo escuchar su voz. Lo que sucede es que para que una persona pueda vivir haciendo lo que es del agrado del Señor, primero tiene que haber conocido su voluntad.
Sermón de Radio
La clave para una paz permanente II
La paz con Dios es fruto de nuestra unidad con Él.