¿Cómo podemos amar a alguien cuando esa persona nos demuestra de todo menos amor? Pedro dice: “Habiendo purificado vuestras almas por la obediencia a la verdad, mediante el Espíritu, para el amor fraternal no fingido, amaos unos a otros entrañablemente, de corazón puro” (1 Pedro 1.22).
El Dr. Stanley explica que, si vamos a ser capaces de amar en tiempos difíciles, primero debemos purificar nuestros corazones siendo obedientes a la verdad de la Palabra de Dios. Solo cuando el corazón es puro somos capaces de amar a alguien. Si podemos aprender a amar a Dios en los momentos difíciles, nos enriqueceremos para poder amar a los demás. Dios nos ama de manera perfecta a cada uno porque nos ama con un corazón puro.